13 de junio de 2010

Corazón Raro



Señores, he vuelto a este callejón sin salida, empecinada en encontrar la respuesta a eso que otros llaman amor. Sabiendo de antemano que quien más piensa sobre ello es quien menos lo siente.

La Biblia nos dice que el amor roza lo puro, y según mi modo de ver, también lo imposible. ¿No les cuesta trabajo eso de aceptar que se “decide sentir”, que se traduce como “decidir amar”? según el concepto inmortalizado en las santas escrituras, solo Dios podría sentir amor por algo.

Tampoco estoy de acuerdo en eso de que se ama más y mejor en cuanto se este mas cerca del suicidio o del asesinato- siguiendo a José Ortega y Gasset- eso no garantiza ni la cantidad ni la calidad del amor. Esas muestras de pasión “solo evidencian un estado patológico que implica la defectuosidad del alma”, propio de las personas obsesivas y básicas.

Algunos pretenden establecer el amor como una alegría, un girar en torno a una persona, un deseo y la seguridad de que existes para alguien, pero decir esto es solo enumerar sus consecuencias y no definir el amor en si mismo. Es mas, la existencias de aquellas no garantizan la existencia del amor, podrían ser perfectamente manifestaciones del odio más profundo.

Tal vez el amor se oculta en la tristeza, quizás sea la tristeza misma y amar seria sentir esa angustia que el ser amado produce en nosotros. Algunos, lejos de ser sadomasoquistas, piensan que el amor se calcula y se mide en el dolor y sufrimiento que es capaz de producir. Así surgen frases que se quedaran en la historia como “os amo como hay que amar: con desesperación” de Julie de Lespinasse o como lo evidencian las cartas de Mariana Alcofarado, religiosa portuguesa, que termina diciendo “Adiós; amadme siempre y hacedme sufrir aún mayores males.”

Sin duda sigue siendo la salida más fácil pensar que el amor son solo reacciones químicas con vistas a la conservación de la especie, pero donde quedan nuestras aspiraciones metafísicas y la convicción de que somos algo más que simples bestias.

Lamentablemente aun no hay respuestas para esta Libertina.


3 de junio de 2010



"No te apartes ni te olvides de las razones de mi boca",
No te calles, no me dejes en tus silencios más profundos.

Llenas mis manos de tus espacios sin tiempo
Y vuélvete tan mío como las mismas manos.




L. Alison Ramos M.